Para celebrar el 20 aniversario de Toy Story, Pixar abrió las puertas de sus archivos, situados en Emeryville, California.

Un busto modelado a mano en plastilina de Buzz Lightyear da la bienvenida al archivo vivo de Pixar, donde, controlada la humedad y la temperatura, se almacenan miles de bocetos, modelos, storyboards, guiones y otros materiales vulnerables al tiempo que los estudios Pixar han producido durante casi 30 años.

Aunque Pixar es conocida principalmente por sus películas de Animación creadas con el PhotoRealistic Render Man, un interfaz de programación de aplicaciones de renderización que genera imágenes de alta calidad, es emocionante ver reunidas ideas, bocetos, apuntes, garabatos, colorkeys...cajas y cajas de arte en papel que nos recuerdan la fase de trabajo analógica de toda producción digital. Por ejemplo, las carpetas de dibujos y bocetos de John Lasseter, de la década de 1980, que revelan la génesis de Woody y Buzz, mucho antes de que Toy Story tomara forma. El proyecto original estaba destinado a ser un corto de televisión, A Tin Story Christmas, que nunca se realizaría pero cuya idea fue retomada cuando Pixar firmó un acuerdo con Disney para un largometraje de animación en 1990. Los bocetos muestran el proceso de evolución hacia los personajes definitivos de la película Toy Story. Durante la transformación, se realizaron numerosos modelos 3D en plastilina, esculturas habituales que servían de apoyo para el animador y que, dada la fragilidad del material, muchas han desaparecido, aunque se conservan los moldes. Precisamente, estos moldes sirven para  la reproducción de figuras como las que vimos el año pasado durante nuestra visita a la exposición  Pixar, 25 años de Animación en CaixaForum, ¿recordáis?

Colección de esculturas en la Exposición Pixar, 25 años de Animación

Entre las esculturas que se pueden observar en los archivos hay una original de 1995, modelada en arcilla, de Woody.

Se trata de una escultura digitalizable, ya lista para ser utilizada por los artistas del departamento de AnimaciónCGI.

Otra carpeta está repleta de fotografías que documentan gran variedad de texturas: esquinas descascarilladas, asfalto agrietado, herramientas oxidadas…que se utilizaron en su momento como referencia para los elementos de la película. Y es que, además de su valor histórico, el archivo de Pixar tiene un uso práctico como biblioteca de documentación para animadores y artistas. Sin ir más lejos, los creadores de Monster, University acudieron a los modelos de Monsters Inc de 2001 y, en este momento, son igualmente útiles para la producción en marcha de Los Increíbles, 2. 

Los archivos de Pixar ocupan una superficie de unos 1600m2 y está previsto un traslado a una superficie mayor. Se trata, por tanto, de una colección de documentación viva que ha dejado y sigue dejando un legado físico que materializa la imaginación colectiva de una legión de artistas que, durante casi 30 años, han dejado su huella en las animaciones de la firma.