La regla de los tercios es una de las técnicas más populares en Composición. Trata de la distribución del espacio dentro de la imagen guiando el ojo del espectador hacia el centro de interés.
Si dividimos mentalmente la imagen en tres tercios, tanto horizontales como verticales, los puntos fuertes de interés estarían situados sobre las intersecciones. Podemos atraer la atención sobre uno de ellos o sobre la diagonal que une dos puntos fuertes.
La composición es inherente en cualquier imagen y es bueno aprender las reglas que equilibran su estructura. Es probable que durante nuestros estudios artísticos hayamos aprendido a utilizar la Regla de los Tercios como método para componer una imagen. Con su aplicación, generalmente, conseguimos equilibrio, profundidad, fuerza e interés.
En esta imagen se establece el área de interés con una diagonal visual que va desde uno de los puntos fuertes al otro.
¿Pero, es necesario utilizar siempre esta norma?
No es necesario. La podemos incorporar o no.
A veces, en lugar de recurrir a las reglas compositivas de manera estricta, puede ocurrir que nos parezca interesante concentrarnos en elementos de distracción o llamar la atención con un error de jerarquía. La mente percibe estímulos visuales que separan claramente un tema de su fondo. Es lo que ocurre cuando existe un fuerte contraste de luz-sombra en la zona que nos interesa destacar, por ejemplo.
Buscando otras opciones aparte de la Regla de los Tercios, tenemos pautas muy interesantes a seguir para nuestra composición. Una de ellas es la Ley de Continuidad y su herramienta más representativa: el arabesco. Se trata de un elemento curvilíneo que proporciona belleza y dinamismo a nuestro trabajo.
Ejercicio de Pintura Digital de nuestra alumna Mariana Entrena. Hemos resaltado el arabesco que compone la ilustración.
La Simetría es otra técnica valiosa en composición. La mente humana tiende a buscar el balance en las imágenes y si no lo encuentra, ésta nos resulta ingrata.
La Ilustración Digital de nuestra alumna Mireya Puertas nos sirve como ejemplo de simetría en el peso visual, tanto vertical como horizontal.
La Composición en nuestra imagen es algo a lo que no debemos restar importancia. Los principios de la psicología de la Gestalt aplicados a la fotografía, la pintura, el diseño, la Ilustración…la imagen en su totalidad, establecen que el todo es más que la suma de las partes. Si comprendemos cómo funciona la percepción humana sabremos componer una imagen que consiga la sensación que buscamos.
Que nadie se sienta desfallecer intentándolo, debemos ser honestos: lleva tiempo aprender e interiorizar cómo debemos aplicar en nuestros trabajos las leyes de composición y conocer el funcionamiento de nuestra percepción visual. Realmente, nunca dejamos de aprender, eso lo hace divertido 😉